La Viceconsejera de Políticas Sociales del Gobierno Vasco, Lide Amilibia, ha sido la encargada de entregar el primer
“Premio de Buenas Prácticas de Amigabilidad 2019”,
en el municipio alavés de Zambranay el reconocimiento con el primer accésit a la
Asociación Bizi Ispasterko Nagusiak.
“Buenas prácticas en amigabilidad 2019”, es el título del programa intergeneracional de la Asociación Bizi Ispasterko Nagusiak, en colaboración con la escuela pública de Ispaster y la Asociación de padres y madres de Ispaster (Bizkaia).
Se trata de un programa que impulsa acciones intergeneracionales. Maite Zabala, responsable del proyecto ha explicado que “comenzamos hace siete años dándole forma. En este momento, se ha convertido en un proyecto enriquecedor que sirve de vínculo y de puente entre las generaciones de la localidad donde se intercambian conocimiento y valores”.
A la hora de desarrollar el proyecto, primero analizan cada tema de una manera teórica para luego pasar a la práctica. El año lo dividen en trimestres, siendo la culminación de la primera el 3 de diciembre, día del euskera, donde las personas mayores preparan talos y enseñan a los más jóvenes a cocinarlos. Durante el segundo trimestre se centran en conseguir recursos para un municipio del Sahara con el que están hermanados desde hace varios años. En el año 2019 consiguieron 500 € que fueron destinados a dotar de energía eléctrica la escuela de la localidad del Sahara, así como otros utensilios necesarios para la enseñanza. Y por último, en el tercer trimestre, realizan la “pomada Sanjuanera” analizando las plantas y haciendo después la crema para la piel.
Al ser un proyecto intergeneracional, los más jóvenes enseñan a las personas mayores a utilizar las nuevas tecnologías, tales como la tarjeta de Osakidetza y Lurraldebus, el ordenador, el móvil, las redes sociales…
Tal y como ha indicado Zabala “conseguir este premio ha sido un reconocimiento a la labor que llevamos realizando en Ispaster desde hace años. Pone en valor las acciones desarrolladas entre las personas mayores y las jóvenes del municipio ya que, además de conocimiento, se transmiten otra serie de valores como la experiencia, el auzolan, el respeto, la inclusión…”
